El sistema de salud pública en la capital rionegrina atraviesa sus horas más críticas.
La crisis en el Hospital Zatti de Viedma ha escalado tras confirmarse una serie de renuncias de jefes de servicios estratégicos, quienes aseguran que el hospital de cabecera de la región atlántica ya no puede garantizar una atención segura y de calidad.
Lo que comenzó como un reclamo por mejoras salariales y falta de insumos se ha transformado en un éxodo de profesionales que pone en jaque la operatividad de áreas vitales, dejando a la comunidad en una situación de vulnerabilidad sanitaria sin precedentes.
Un sistema quebrado: Los motivos detrás de las renuncias
La crisis en el Hospital Zatti de Viedma no es un evento aislado, sino el resultado de un deterioro sostenido. Los profesionales que presentaron su dimisión coinciden en un diagnóstico alarmante: el sistema está «al límite».
- Atraso salarial: Los sueldos del sector público han quedado profundamente relegados frente a la inflación y en comparación con las ofertas del sector privado o de provincias vecinas.
- Falta de insumos: Médicos y enfermeros denuncian que la carencia de materiales básicos y medicación dificulta la resolución de cuadros clínicos cotidianos.
- Sobrecarga laboral: Con menos personal para cubrir las guardias, el agotamiento físico y mental (burnout) ha diezmado a las plantillas de especialistas.
El impacto en la comunidad: Servicios afectados
La situación es particularmente grave en servicios como Pediatría, Cirugía y la Guardia Central. La salida de los jefes de área implica no solo la pérdida de atención directa, sino también la ruptura de la cadena de mando y la formación de nuevos residentes.
Los pacientes que no cuentan con cobertura de obra social son los más perjudicados. La derivación a clínicas privadas no siempre es una opción viable debido a la saturación del sector privado y los costos que la provincia debe afrontar ante la falta de capacidad propia en el hospital público.
El reclamo al Ministerio de Salud de Río Negro
Desde los gremios de salud, como ASPUR y ATE, se ha exigido una convocatoria urgente a paritarias sectoriales y un plan de contingencia para el abastecimiento de insumos.
Sin embargo, las respuestas oficiales hasta el momento son percibidas por los trabajadores como insuficientes ante la magnitud del conflicto.
La comunidad médica advierte que, de no mediar una solución de fondo que contemple una recomposición salarial real y una inversión estructural, el Hospital Zatti podría enfrentar un cierre técnico de servicios esenciales en el corto plazo.