El incendio forestal que arrasó con 20 hectáreas de bosque nativo en el cerro Meta, dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi, ya tiene un responsable confeso.
La Policía de Río Negro confirmó la detención de un hombre de 45 años, oriundo de Rosario, quien admitió haber iniciado el fuego, supuestamente de manera accidental.
Cómo comenzó el incendio
Según informaron las autoridades, el sujeto ingresó el domingo por la noche a un predio ocupado por la comunidad Buenuleo, al pie del cerro Ventana, y declaró que encendió una fogata para secar su ropa, que estaba húmeda. Sin embargo, debido a las condiciones del viento, las llamas se descontrolaron rápidamente, desencadenando un incendio que mantuvo en vilo a la región.
Combate del incendio
El foco ígneo, detectado el 15 de febrero, demandó la intervención de brigadistas del Parque Nacional, bomberos voluntarios y medios aéreos para evitar su propagación. Tras varios días de intenso trabajo, los equipos lograron contenerlo, pero el daño ambiental ya estaba hecho. Las llamas arrasaron con una importante superficie de bosque nativo, afectando gravemente el ecosistema local.
Investigación y responsabilidades
La causa fue elevada a la Justicia Federal, que ahora investigará las circunstancias del hecho y determinará las responsabilidades del detenido. El hombre, oriundo de Rosario, continúa bajo custodia y podría enfrentar cargos por su participación en el incendio.
Impacto ambiental
El incendio en el cerro Meta no solo representa una pérdida significativa de bosque nativo, sino que también pone en riesgo la biodiversidad del Parque Nacional Nahuel Huapi, uno de los espacios naturales más importantes de Argentina. Las autoridades ambientales y organizaciones conservacionistas han expresado su preocupación por el impacto a largo plazo en la flora y fauna de la región.
Reflexión final
Este incidente destaca la importancia de tomar precauciones extremas al realizar fogatas o cualquier actividad que pueda generar incendios, especialmente en áreas protegidas. La colaboración entre autoridades, brigadistas y la comunidad es fundamental para prevenir tragedias ambientales como esta.